Por Dr. Rubén Visconti*
Desde la iniciación del gobierno de Néstor un conjunto de seudos
economistas que se auto clasifican como
defensores de la ortodoxia, es decir, de la economía liberal o de mercado que
desde su nacimiento, allá por la segunda mitad del siglo XVII, han conseguido
imponer sus ideas al mundo capitalista mediante la formulación de un conjunto
de necedades que no toleran ninguna crítica sin desmoronarse totalmente. Señalemos con algunos ejemplos la veracidad de nuestras afirmaciones; la
principal de ellas constituye la crítica
fundamental de esa arbitraria teoría del mercado.